Por Polón Vásquez
FILADELFIA, PA—La comunidad dominicana residente en esta ciudad, en medio de un tormentoso mar de angustia, llanto, luto, dolor y tristeza rezaron el último réquiem a los cadáveres de los tres bodegueros hispano que fueron vilmente asesinados recientemente por delincuentes en un establecimiento comercial en el sector de Mills Creek situado en el extremo Oeste de Filadelfia.
El velatorio de los cadáveres de Porfirio Núñez, su hermana, Lina Núñez Sánchez y su esposa Johanna “Carmen” Duran se llevo a cabo la noche del martes 13 de septiembre en una misa de cuerpo presente en la Iglesia Encarnación de la calle 5 y Lindley al norte de Filadelfia donde asistieron alrededor de 1,800 personas quienes acongojados les dieron el ultimo adiós a sus apreciados seres.
Los tres ataúdes conteniendo los cuerpos sin vida de Porfirio, Lina y Johanna fueron colocados en el pasillo central de la parroquia donde familiares, amigos y relacionados los despidieron bañados por un torrente de lagrimas en sus rostros por la irreparable perdida.
Al finalizar la misa a las 9:30 de la noche, los féretros herméticamente cerrados fueron montados en tres carros fúnebres de “Gacain Funeral Mansión” para inmediatamente ser trasladados al aeropuerto internacional JF Kennedy de Nueva York desde donde serán transportados a República Dominicana, su país de origen.
De acuerdo a informaciones obtenidas por Reporteros de Impacto los ataúdes saldrán a las 6:30 de la mañana en un vuelo de línea aérea “American Airline” con destino a Santiago de los Caballeros y posteriormente llevados a la comunidad de Moncion donde finalmente recibirán cristiana sepultura.
Las tres personas, victimas de la delincuencia organizada fueron asesinadas el pasado 6 de septiembre del 2011 por dos asaltantes de la raza negra que penetraron aproximadamente a las 7:40 de la noche a su establecimiento comercial “Lorena’s Grocery” situado en el 850 de la calle 50 esquina Parrish.
“Espero que las autoridades policiales de Filadelfia arresten pronto a los asesinos de mis hijos e inmediatamente sean conducidos a los tribunales judiciales y condenados ejemplarmente para que paguen por estos horrendos crímenes”, dijo sollozando al termino del oficio religioso Ángel Maria Tavera, padre de Porfirio y Lina y suegro de Johanna Duran.
Maria Peralta, progenitora de Lina y Porfirio, destrozada por la tristeza y el dolor de una madre dijo que la muerte de sus hijos no se quedara impune y solicitó la colaboración incondicional de líderes de organizaciones comunitarias y de las autoridades municipales, policiales y judiciales de Filadelfia.
En relación a estos asesinatos, todavía el Departamento de homicidios de la Policía de Filadelfia no ha ofrecido informaciones sobre el arresto de alguna persona en conexión con el hecho de sangre. Sinmbargo, solicitaron la ayuda de la comunidad para que ofrezcan informes confidenciales sobre el caso, llamando al teléfono 215-686-3334.
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