Las autoridades filipinas alertan del riesgo de epidemias en áreas destruidas

Cagayan de Oro (Filipinas), 21 dic (EFE).- Las autoridades sanitarias filipinas alertaron hoy del peligro de que se produzcan epidemias en las zonas del norte de la isla de Mindanao afectadas por las riadas que han causado cerca de un millar de muertos.

El departamento de Sanidad indicó en un comunicado que ha enviado equipos médicos a la región ante el riego para la salud que plantea la contaminación de los pozos de agua por la descomposición de cuerpos de personas o animales y desperdicios.

A las autoridades sanitarias les preocupa, además, la notable falta de higiene consecuencia del hacinamiento de personas que han buscado cobijo en los centros de acogida montados en más de medio centenar de lugares, especialmente en las localidades de Cagayan de Oro e Iligan, las más afectadas.

"Hay posibilidad de que emerjan brotes de enfermedades infecciosas que pueden causar epidemias dado que las concentraciones de gente afectada son grandes y hay falta de higiene, además de escasez de agua", indicó el departamento.

El Consejo Nacional de Prevención y Respuesta de Desastres elevó hoy a 976 el número muertos causados por la fuerte tormenta tropical "Washi" a su paso el paso fin de semana por el norte de la isla de Mindanao.

La mayoría de muertos han sido localizados en las ciudades de Cagayan de Oro e Iligan, y alrededor de un centenar en las provincias de Bukidnon, Negros, Zamboanga del Norte y Compostela Valley.

Otras 46 personas continúan desaparecidas, mientras que el número de heridos asciende a 1603 en las 13 provincias afectadas.

La tormenta tropical también causó 348.749 damnificados y un total de 44,213 afectados se encuentran en 60 centros de acogida

Los expertos de las agencias internacionales identifican el chabolismo como el principal factor del gran número de muertos que causan en el país los desastres naturales y que evidencian el mal estado de las infraestructuras.

La incontrolada deforestación también favorece las riadas y avalanchas de tierra que son frecuentes durante la estación lluviosa que por lo general comienza en mayo y concluye en noviembre. EFE