SANTIAGO,- El aumento de franjas y ampliación de rutas aprobadas en la alcaldía del municipio de esta ciudad, que encabeza el alcalde del Gilberto Serulle tiene indignado a los choferes del transporte público de esta ciudad, ante los privilegios que son otorgados a personas que nada tienen que ver con el sector del transporte.
El lucrativo negocio que históricamente ha generado violentos enfrentamientos entre empresarios del transporte y manejadores de las de rutas urbanas de esta ciudad han causado quejas en los trabajadores del volante, que rechazan que las franjas son manejadas por personas que a su juicio su mayoría no tienen que ver con el sector trasporte.
Los choferes de las rutas A y K de esta ciudad, se quejaron de la situación, ya que sólo poseen un carro o un minibús, o que trabajan para el propietario de estos vehículos, y se quedan con muy poco de todo el dinero que mueve el servicio del transporte de la ciudad corazón.
El costo de una ruta de esta ciudad oscila entre 350 pesos RD$400 mil, si se trata de rutas con mucho flujo y una distancia más extensa de lo habitual, como la que moviliza pasajeros entre el centro urbano de Santiago y la comunidad.
La creación de nuevas rutas en la zona urbana de Santiago, aumentando el ingreso vehicular diario a esta zona de unos 600 vehículos adicionales, ha convertido el tránsito de esta ciudad en un total caos.
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