Una mujer de 55 años en la ciudad de Atacama falleció por un infarto cardíaco, informó el intendente (alcalde) Rafael Prohens, quien atribuyó el deceso al pánico que sintió la víctima durante el remezón.
Las autoridades informaron que los daños materiales fueron limitados, y descartaron la posibilidad de un tsunami.
"Efectivamente, una mujer falleció por el susto", dijo Prohens en declaraciones a la TV estatal.
El centro de Investigación Geológica de Estados Unidos informó originalmente que el sismo había tenido una magnitud de 6,7, pero posteriormente ajustó la cifra al alza.
Añadió que el epicentro del movimiento telúrico, ocurrido alrededor de las 16:15 (2015 GMT), se ubicó unos 54 kilómetros (33 millas) al norte de Vallenar, Chile.
El sismo fue perceptible en Santiago, donde algunos edificios de oficinas se remecieron. Sin embargo, se sintió con más fuerza en el norte, donde la televisión estatal mostró imágenes de algunas mercaderías que se cayeron de los estantes en los supermercados, y de ventanas rotas en varias viviendas de Vallenar, Copiapó y otras localidades cercanas.
Algunos testigos dijeron que la gente salió corriendo aterrorizada hacia las calles. Las líneas telefónicas se saturaron y parte del suministro eléctrico se interrumpió temporalmente.
Pero la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior de Chile (ONEMI) informó que no había reportes de heridos, y que los daños infraestructurales parecían mínimos.
El Servicio Oceanográfico descartó la posibilidad de un tsunami.
"Sin duda que un sismo de esta intensidad provoca quebrazones de vidrios, desplazamientos de algunos muebles, principalmente en los centros comerciales y los supermercados", dijo el jefe nacional del centro de alerta del ONEMI, Miguel Ortiz.
"Pero aquí lo primordial es valorar la actitud de la población".
"Al momento, no hay información de alteración o daños a las personas, producto de este sismo de mediana intensidad", agregó Ortiz.
Chile es uno de los países más propensos a sismos en el mundo.
Un terremoto devastador de magnitud 8,8, uno de los más intensos en la historia, provocó un tsunami en 2010, y causó la muerte de 551 personas, además de destruir 220.000 viviendas y arrasar con puertos, y complejos turísticos costeros.
El desastre costó al país 30.000 millones de dólares, o 18% de su producto interno bruto.
Justo frente a la larga costa de Chile, la placa tectónica de Nazca se inserta por debajo del continente, empujando a los Andes hacia una altitud incluso mayor.
El sismo de 2010 fue tan poderoso que modificó el eje de rotación de la Tierra, lo que acortó los días por poco más de un microsegundo.
El sismo más intenso del que se tenga registro ocurrió también en Chile. Aquel terremoto de 9,5 mató a más de 5.000 personas en 1960.
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