Por Roberto Pérez
SANTIAGO.-Una alegada decepción amorosa desespero a una joven de 20 años y como la desesperación es parte del fracaso, intento poner fin a su vida.
SANTIAGO.-Una alegada decepción amorosa desespero a una joven de 20 años y como la desesperación es parte del fracaso, intento poner fin a su vida.
Robeiris Mena quiso solucionar el problema ingiriendo una sustancia venenosa en su hogar de Bocas de Licey, municipio de Tamboril, pero Dios todavía no quería su presencia.
En estos momentos la muchacha se encuentra en una condición critica de salud pero viva interna en el hospital José María Cabral y Báez.
Tan pronto fue encontrada por sus familiares, fue trasladada al centro asistencial, donde por suerte llego viva y le practicaron un lavado de estomago.
Respira todavía por Misericordia divina, dicen testigos, que señalan de extrema gravedad su situación.
Robeiris Mena, alegan parientes, habría sufrido una decepción amorosa y por esto intento despedirse del mundo. Pese a su estado de salud, se espera su recuperación.
En caso de que así sea, es casi seguro que vera de otra forma al mundo y lo bueno que es estar vivo, con problemas o sin ellos.
Y ojala alguien le haga comprender que si su novio no la quieres, que mas pa´lante vive gente.
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