Así es cada día de Alberto Muñoz: más de 25 cigarros acompañan su rutina. Lleva 40 años fumando y asegura que ha intentado dejar lo que él denomina su vicio, pero a pesar de todos sus esfuerzos, no lo ha logrado.
Para los expertos la fuerza de voluntad es vital, pero no es suficiente: se requiere de un sistema multidisciplinario que brinde ayuda al paciente que intenta dejar de fumar.
En el Instituto del Tórax cuentan con un policlínico de tabaco que cuenta con toda esta ayuda para los pacientes que quieren dejar el vicio del tabaco.
Además, a las cajetillas con fuertes mensajes alusivos a enfermedades producidas por el cigarro y al aumento del impuesto específico al tabaco, se suma ahora un programa piloto de apoyo telefónico para personas que intentan dejar de fumar, creado por el Ministerio de Salud, a través de la línea salud Responde.
El número es gratuito y principalmente pretende dar apoyo y evitar recaídas en quienes ya han logrado estar un tiempo sin fumar. El programa, que lleva recién 15 días funcionando, se inspira en experiencias de otros países que han dado buenos resultados.
De acuerdo al Ministerio de Salud, en Chile fuma el 40,6% de los mayores de 15 años. Además el 54,4% de los hombres lo hace, muy cerca del 44,3% de las mujeres. En el caso de ellas, muchas veces el hábito se produce una mala respuesta a la ansiedad.
Problemas emocionales como éstos hacen que muchas personas, que ya han dejado de fumar, vuelvan a acercarse al tabaco. La tarea fundamental del programa telefónico del Ministerio es precisamente, ayudar a evitar las recaídas
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